24 oct 2011

Harry Potter y El Regreso de Voldemort


Capitulo 8
El hombre que reemplazo a Kingsley Shacklebolt era Antonin Dolohov, el asesino de Remus Lupin.
Su risa pronto invadió todo la oficina del ministro, que en aquel momento era imposible saber de su suerte.
-¡¿Donde esta el ministro?! -grito Harry desesperado
-Esta bien, no te preocupes -dijo Dolohov mostrando su escalofriante sonrisa- eso ahora no viene al tema.
-¡¿Que quieres?!
-Te quiero a ti -dijo acercándose a Harry y tomando la cara de él como si fuere un nuevo descubrimiento- bueno, alguien te quiere a ti, Potter. Tengo que cumplir una tarea.
¿Tarea? ¿Qué tarea tenía que hacer un ex-mortífago que no tenía ya ningún futuro en el mundo mágico?
Dolohov vio la cara de Harry. Harry se dio cuenta de que Dolohov tenía cara de triunfo, y supuso que algo muy malo iba a ocurrir pronto.
Dolohov apuntó a Harry, e hizo un hechizo que Harry no pudo entender. Todo oscureció...
***
Cuando Harry despertó, se encontraba en un lugar muy familiar. Rodeo sus ojos por todo el lugar y supo que era Pequeño Hangleton. El mismo lugar donde Voldemort había reencarnado la última vez. Harry cada vez estaba mas asustado.
-Bienvenido Potter -dijo una voz familiar, una voz muy parecida a la de una serpiente...
-¿Quien eres? -pregunto Harry. Su voz sonaba fuerte, pero dentro de él, todo su cuerpo sentía un miedo invencible.
La voz no volvió a responder. Harry comenzó a pensar que era parte de su imaginación, un pensamiento agradable que calmaba su miedo interior.
Los minutos pasaban, nadie aparecía por aquel desierto cementerio. Harry comenzó a pensar que ya nadie iba a llegar...
-Discúlpame la demora Harry -dijo Dolohov, como si fuera un viejo amigo de él, apareciendo repentinamente detrás de él- No te preocupes, muy pronto regresara Lord Voldemort.
-¡¡¡MENTIRA!!! ¡¡¡VOLDEMORT ESTA MUERTO!!! -grito Harry perdiendo totalmente la paciencia.
Dolohov estaba loco. Voldemort había muerto en el Gran Comedor de Hogwarts. Harry lo había matado. Todo el mundo había visto el cuerpo inerte de Voldemort. Ademas ya no estaba atado a la inmortalidad, porque Harry había destruido todos los horocruxes, así que Tom Riddle no tenía forma de morir, ¿o sí?
A pesar de todo, Voldemort se había adentrado a las artes oscuras mas que ningún otro mago de los últimos tiempos. ¿Sería él capaz de encontrar mas de una forma de atarse a la inmortalidad que nadie jamas haya conocido?
¿Estaría Voldemort otra vez convertido en nada como la última vez que regreso? ¿Sería Dolohov el siguiente vasallo que daría su carne por reencarnar una vez mas a el Señor Tenebroso? ¿O había otra forma de que Voldemort regresara? Quizás nunca murió, y todo fue una ilusión de Harry...
Antes de que Harry se hiciera otra preguntas más, Dolohov hizo aparecer un caldero gigante hirviendo, carne de humano, huesos (seguramente del padre de Tom Riddle) y un sillón que daba espaldas a Harry. El regreso de Voldemort se acercaba...

2 oct 2011

Harry Potter y El Regreso de Voldemort


Capitulo 7

-¡¡Cormac!!

Aquella revelación lo impacto igual o más que saber que quizás Voldemort regresaría. No podía creer que un Gryffindor hiciera todo lo que un Slytherin sería capaz de hacer. Eso debía de ser su imaginación. Siempre creyó que Cormac era ambicioso al poder, pero no creía que hasta ahora lo era. Además Harry ya no era nada de lo que él quisiera ser. Según él, Harry, el sueño de Cormac era ser jugador de quidditch, no jefe del departamento de aurores. Todo era muy extraño.

Aun así Harry estaba muy enojado.

-¿Porqué tú? –preguntaba Harry muy angustiado, se había olvidado de que estaba bajo un encantamiento y que Cormac no podía responder.

Se acercó más a él, y lo miro con más odio de lo que había incluso mirado a Lord Voldemort. Aquel hombre, había lastimado a la señora Weasley e incluso casi lastima a su hija pequeña.
-¡TÚ HAS LASTIMADO A LA SEÑORA WEASLEY, Y CASI LASTIMAS A MI HIJA! -cada palabra contenía más odio que la anterior- ¡QUISIERA MATARTE AHORA MISMO, PERO NECESITO SABER PORQUE HAS HECHO TODO ESTO!
***
-Ministro, este hombre quizás fue quien atacó a la señora Weasley –comenzó a decir Harry cuando llegó al ministerio de Magia donde lo esperaba el ministro en su oficina- y estuvo a punto de atacar a mi hija, Lily.
El ministro no dijo nada, solo miraba a Harry con ojos de león al cazar a su presa.
Todo era muy extraño, ya que usualmente el ministro no se quedaba así ante una situación como aquella. Por culpa de Cormac Mclaggen, la señora Weasley se debatía entre la vida y la muerte, ¿eso no era tan importante para el ministro, que miraba a Harry como la presa de un hombre lobo?
-Ministro, ¿se encuentra bien? –pregunto Harry preocupado, aunque muy enojado.
-Sí –respondió con una sonrisa macabra-, pero estaría mejor si tuviera algo más.
¿Algo más? Todo era cada vez más extraño. Aquel señor no era el ministro que Harry veía todos los días, ni siquiera el que había visto hace menos de doce horas.
-¿Qué necesita? –dijo Harry alejando poco a poco del ministro. Hasta había olvidado que llevaba a Mclaggen con él.
-Necesito que vengas conmigo –dijo el ministro lentamente
-¿Con…con usted? –Preguntó Harry nervioso- ¿pa…para qué?
-Eso pronto lo sabrás –dijo, mostrando una vez más su sonrisa macabra- por favor, coge de mi mano.
-¡NO...NO LO HARE! –Exclamó Harry con todas sus fuerzas- ¡NO IRE HASTA QUE ME DIGO DONDE Y PARA QUE QUIERE LLEVARME!
-Está bien –dijo el ministro en un tono más calmado- creo que tendré que llevarte de otra manera.
Antes de que Harry pudiera reaccionar, unas cuerdas cayeron encima de él y lo sujetaban con fuerza.
-¡¡¡SUELTEME!!! –gritaba Harry, tratando de coger su varita de la túnica, aunque era algo imposible, pero necesitaba hacer…
-Harry, Harry, Harry –dijo una voz diferente a la del ministro, pero que salía del ministro- tú nunca aprendes, ¿verdad?
Entonces, de un momento a otro, antes sus ojos, otro hombre reemplazaba a Kingsley Shacklebolt…